El Clan de las Tormentas: 13513

lunes, 13 de mayo de 2013

13513

Y ahora la soledad como un agujero infinito

sobre un alma aguijoneada

(ya ves, mi corazón que se resiste a tener escamas)

naufragando en las costas de esta crueldad tan cotidiana

a pesar de haberme refugiado en desear el olvido

y en intentar querer no haberte querido

ni deseado

ni recordado

ni amado

ni soñado

en tu reino de palabras de plástico

tan artificiales como tus labios

porque nada eras, en realidad, antes de conocerte

y nada sigues siendo ahora que te has marchado

porque tan sólo es mi alma la que te hace necesaria

tú que sólo vivías porque yo me había sacrificado

entregado como el hijo del dios de tu cuerpo

que cae herido al haber rozado tu corazón tan blanco,

tan vacío, tan pálido.

Tanto odio por esta casualidad que me ha desquiciado

y observo el mar, y sus olas que van y vienen

siento con la sal cómo intentan cicatrizar heridas

que tengo tan dentro; tú que viste que para darte vida

primero yo te di mi aire y caí asfixiado

y cuando me arrastré pidiendo lo que tantos tienen

sólo encontré tu lejanía, y tu silencio,

palabras muertas y huecas

para mí, que por ti a mí me habría matado

para ti, que por mí a ti te habrías perdonado

y, en cambio, sólo quedan sombras

allí donde tus ojos todo lo habrían iluminado.

No hay comentarios:

Pásalo

Mandame a Facebook